La mañana que nací, Marta Angela casi tiene que irse sola al hospital. Hector Angel, que siempre fue un tipo muy festivalero y alegre, estaba con ella en pleno carnaval. Pero daba penita irse. Es que según cuenta la historia y el anecdotario familiar, se estaba tan lindo que dolía supender la fiesta. Esperaron hasta último minuto, bailando y riendo. Cuando se hizo ya inevitable la partida, fueron TODOS los presentes (amigos, no tanto, conocidos y curiosos) rumbeando en caravana a recibirme. ... hoy tengo 36 años. No creo que haya diferencias notables con respecto a los 35; pero si las hay, que sean para mejor carajo. Que de palos ando dolido.
Comentarios
Hablamos por hablar y pretendemos ser respetados por lo que decimos. Pero pocas veces escuchamos lo que decimos.La gran bocota.
Hablar para uno implica conocerse, o empezar a tratar de hacerlo. Hablar con uno y tener la capacidad de alejarse de ese uno implica comenzar a entenderse desde afuera.
La frase va por ese lado. Como queres entender al otro si ni siquiera te entendes vos?
Saludos! Gracias por la palabra.
http://enalgunlugardetrasdelarcoiris.blogspot.com/2007/10/no-tengo-palabras-que-expresen-lo-que.html
saludos, excelente post.